lunes, abril 26, 2010




Pasarán los años por tu pelo,
las sombras lucirán inertes sobre tus manos,
se perderán en tu cuerpo —como un hilo de vida—
las canciones de un viejo cantautor.

Seguirás con tus historias,
con ese sabor a tabaco en tus labios,
y en tus sueños seguirás recordándome,
escribiendo poemas en la madrugada,
intentando olvidar, quien sabe,
el día que nos conocimos.

Pero despertarás y no estaré ahí,
despertarás con ese vacío irremediable,
con ese dolor en el alma,
pensando en este poema que jamás leerás,
en ese compañero que no te levantará
cuando súbitamente caigas en el vacío de los días.

Antonio Huerta